Descubre la primera fuente que trajo el agua potable a la ciudad en 1845 dedicada a Neptuno, dios del agua
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La Fuente de Neptuno, actualmente, se encuentra en la plaza de la Princesa, dentro del Parque Grande José Antonio Labordeta de Zaragoza.
Plaza Princesa con la Fuente de Neptuno
La Fuente de Neptuno, inspirada en su homónima madrileña situada en el Paseo del Prado de Madrid, está construida en piedra y está formada por un pilón circular sobre el que cae el agua. En su centro se levanta una pirámide truncada en la que en sus extremos se sitúan cuatro delfines de los que de sus bocas emana el agua.
Entre los delfines existen cuatro placas con inscripciones que hacen alusión a Isabel II, presidiendo la fuente se sitúa la estatua de Neptuno sujetando un tridente.
Ficha oficial técnica e histórica de la fuente
La Fuente de Neptuno, también conocida como la Fuente de la Princesa debido a las inscripciones que tiene alusivas a Isabel II, fue la primera fuente de agua potable que se construyó en Zaragoza, en el año 1833, aunque el agua no llegó a ella hasta el año 1845.
Esta fuente se levantó en la Plaza San Francisco, actual Plaza España, en el mismo lugar que ocupaba la Cruz del Coso, un monumento medieval construido en el siglo XV y que durante los asedios que sufrió la ciudad desapareció en el año 1808.
La Fuente de Neptuno, construida por el escultor Tomás Llobet, sirvió de abastecimiento de agua a los vecinos de Zaragoza durante más de 50 años, hasta que en el año 1902 se procedió a desmontarla y almacenarla en unos talleres del ayuntamiento de la ciudad, para construir en su lugar el Monumento a los Mártires.
En el año 1946, se volvió a recuperar esta fuente, instalándose en el Parque Grande de la ciudad, donde se mantiene esta histórica fuente que abasteció de agua potable a toda Zaragoza.